A diferencia de otros dulces mal llamados “tradicionales”, como el trdelník, el kolač es un dulce tradicional en la gastronomía checa y si vas a tomar café a casa de un checo, es posible que tenga preparado un kolač para acompañar. Se preparan de diferentes sabores, normalmente de frutas frescas de temporada como frambuesas, arándanos, albaricoques, de pasta de semilla de amapolas o tvaroh, un tipo de queso fresco checo. A disfrutar!